Esperando la micro, pasaba y pasaba gente, se iba llegaba y yo seguia, ahi, la gente llegaba de a par, algunos solos, me miraban y luego se iban otros solo pasaban nisiquiera a esperar su respectiva micro, esperaba a que alguien llegara y se sentara conmigo, como era de esperarse, no paso nada, pero aveces pienso que el destino es tan graciaso y a la vez misterioso, que puedo decir, ni me di cuenta, y siempre es lo mismo lo que me mueve (y lo que me mata).
Es como la vida, si me hubiera quedado tirada en el suelo, tambien es como la vida, solo espero que la proxima vez cuando mire hacia el otro lado de la calle, haya alguien esperando a que cruze.
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